Ciertamente la situación de seguridad de muchos de los países latinoamericanos no es la mejor. Venezuela está atravesando por una tremenda crisis política, de seguridad y de desabastecimiento; México se encuentra en una guerra cruzada de carteles de narcotráfico, varios países de Centroamérica tienen las Maras y Colombia tiene una guerra interminable entre varios grupos guerrilleros que aun con la desmovilización de las FARC lo más seguro es que no se llegue a la paz absoluta y donde además están los carteles de narcotráfico.
Pero aun así, con todo lo que ocurre en Latinoamérica –asesinatos, secuestros, extorsión, desapariciones forzadas, torturas etc. – el simple hecho de ser nacional de uno de los países en conflicto no es razón suficiente para obtener refugio en Canadá.
Las razones para que se otorgue protección a una persona están contempladas dentro las secciones 96 y 97 del Acta de Inmigración y Refugio de Canadá que se derivan del Convenio de Ginebra. Canadá, como todos los países signatarios de este Convenio, se rige por los preceptos establecidos en él. La definición de un refugiado de acuerdo con el Convenio de Ginebra es una persona que "debido a fundados temores de ser perseguida por motivos de raza, religión, nacionalidad, pertenencia a un determinado grupo social u opiniones políticas, se encuentre fuera del país de su nacionalidad y no pueda o, a causa de dichos temores, no quiera acogerse a la protección de su país; o que careciendo de nacionalidad y hallándose, a consecuencia de tales acontecimientos fuera del país donde antes tuviera su residencia habitual, no pueda o, a causa de dichos temores no quiera regresar a él".. La Sección 97 del Acta de Inmigración y Refugio de Canadá contempla tres causales más que son el riesgo de que la vida de la persona se vea amenazada, de que pueda sufrir tortura o un trato cruel e inhumano en su país de nacionalidad.
La ley de refugio es clara en que la razón para que le sea otorgada protección a una persona es porque esta ha sufrido persecución personal, es decir, que la situación que esta persona enfrenta no es generalizada.
La situación que vive Venezuela desde hace casi dos décadas y que se ha agudizado en los últimos años –escases de comida e inseguridad en las calles- no es una razón suficiente para que a los Venezolanos les otorguen protección de acuerdo con la ley, así como tampoco es para los Colombianos, Centroamericanos o Mexicanos el vivir en medio del fuego cruzado de varios grupos al margen de la ley.
Para que a una persona se le de protección en Canadá, esta debe poder probar que existe una posibilidad sería de que será perseguida de manera personal, que por alguna de las razones establecidas en el Convenio de Ginebra, o que pueda probar que es más probable que no que su vida está en peligro o estar en riesgo; no porque la situación general del país sea violenta, sino porque hay una persona u organización especifica amenazando con tomar represalias contra él o ella en particular y por una razón puntual.
En General para que una solicitud de refugio sea exitosa, la persona debe poder probar que sufre persecución o teme por su vida, que busco alternativas de protección por parte del estado, que buscó reubicarse internamente alejándose de la persona o la organización que lo persigue y que aun así, después de haber agotado todas las instancias, la situación de persecución continua o el riesgo persiste.
Desafortunadamente para los venezolanos la crisis en que se encuentran es este momento, por si sola, tampoco es una causal para que Canadá les de residencia permanente por Razones de Humanidad y Compasión. Este tipo de casos al igual que todos en Inmigración a Canadá se basan en factores específicos de cada solicitante, no en la situación generalizada de un país o un grupo. La residencia permanente bajo Humanidad y Compasión, en términos generales, le es otorgada a personas que se encuentran viviendo en Canadá, que están establecidas y que pueden demostrar que sufrirán si se les ordena abandonar Canadá particularmente por razones que no pudieron proveer o están fuera de su control. Son muy pocas las situaciones en las que se les aprueba la residencia permanente bajo Humanidad y Compasión a personas que se encuentran fuera de Canadá y casi todas ellas están relacionadas con errores cometidos en las aplicaciones de residencia de los que podrían ser sus patrocinadores –conyugues, parejas o padres- o con inadmisibilidades –médicas o criminales- dentro de un proceso de patrocinio.
Desabastecimiento y violencia en Venezuela sin ningún tipo de establecimiento en Canadá, sin haber vivido varios anos, estudiado o trabajado en Canadá no es definitivamente una razón para que se le apruebe la Residencia permanente en Canadá a un Venezolano bajo el programa de Humanidad y Compasión y tampoco lo es para que le sea otorgada protección bajo el programa de Refugio.