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El fácil acceso al crédito en Canadá es uno de los grandes atractivos que atrapa a muchos recién llegados, inmigrantes, residentes y canadienses por igual. Pero así como es de sencillo, también puede convertirse en un riesgo para la salud de nuestra economía personal o familiar.
Es importante considerar, antes de solicitar o aceptar una tarjeta de crédito en Canadá, todas las aristas que involucran y nos presentan para nuestros casos en particular; aquella que otorgue más ventajas para nuestras necesidades, irónicamente no necesariamente tiene que ser la que más nos conviene.
Para una mayor noción de la implicaciones que puede tener una tarjeta de crédito en nuestra vida, es altamente aconsejable recibir la ayuda de un asesor financiero en Canadá que pueda, además de darnos mayores luces sobre el tema, guiarnos a la tarjeta o crédito adecuados para cuidar la salud de nuestras finanzas.
Asimismo, a continuación te presentamos algunos de los errores más comunes que cometen las personas que acceden a un tarjeta de crédito en Canadá por primera vez y los cuales debes evitar cometer:
1. No entender los beneficios
Las tarjetas de nivel básico, que generalmente no tienen una tarifa anual ni requisitos de ingresos, es con lo que podría tener que comenzar para construir su crédito. Cuando se trata de beneficios que requieren algo de organización y matemáticas, la mayoría de las personas probablemente no dedican tiempo a hacerlo.
Debe ver si estas tarjetas realmente valen la pena. Necesita averiguar si hay una tarifa anual, qué es y cuánto debe gastar para obtener suficientes beneficios para que la tarifa anual valga la pena.