Si estás planeando un viaje al otro lado de la frontera en un futuro cercano, las medidas que deberás cumplir ahora han vuelto a cambiar. Eso se debe a que se actualizaron las restricciones en la frontera entre Canadá y EE.UU., y ahora casi todos deben estar completamente vacunados contra el COVID-19 para poder cruzar.
Desde el pasado sábado 22 de enero, el Departamento de Seguridad Nacional de los EE. UU. (DHS, por sus siglas en inglés) requiere que todas las personas canadienses y no estadounidenses estén completamente vacunadas contra el COVID-19 para poder ingresar al territorio estadounidense.
Esto significa que se ha vuelto un poco más complicado conducir a los Estados Unidos, ya que ahora se le pedirá que demuestre su estado de vacunación antes de ingresar (o demuestre una exención válida, si tiene una). A los ciudadanos extranjeros ya no se les permite ingresar a los Estados Unidos por tierra o ferry si no pueden mostrar un comprobante de vacunación completa, independientemente del motivo del viaje.
Esta decisión alinea las restricciones de la frontera terrestre estadounidense y el puerto de ferry con las reglas de viaje aéreo del país, que también requieren que los pasajeros estén completamente vacunados.