Historia, fue una de mis materias favoritas en la escuela. A través de ella me podía transportar y viajar mentalmente a lugares lejanos. Sabemos que la historia nos rodea que a cada segundo y minuto se escribe nuevos pasajes en las paginas históricas de cada país, nación e individuos. Alberta es una región llena de historias unas alegres y otras trágicas.
Hoy les comparto la trágica historia del pueblo de Frank, Alberta este pequeño pueblo minero fue despertado el 29 de abril del 1903 a las 4:10 am por un impacto de rocas de la Montaña Tortuga (Turtle Mountain). Este derrumbe de grandes rocas sorprendió a todo un pueblo que se encontraba dormido.
Alrededor de unas 70 personas murieron entre ellos niños y familias completas. De las 70 personas fallecidas solamente se recuperaron 12 cadáveres, los demás hasta el día de hoy permanecen sepultados bajo rocas. Es increíble que en 100 segundos un pueblo desapareciera en medio de 90 millones de toneladas de roca que cayeron sobre ellos.
Los geólogos han compartido varios factores que contribuyeron con esta catástrofe tales como: la inestabilidad de la montaña, la acción minera en las minas de carbón pudo haber afectado la parte interna de la montaña y por último el invierno con sus cambios de temperatura.
Así se previene desastres a futuro
Actualmente los geólogos de la Universidad de Calgary han implantado unos sensores donde pueden notificar si hay movimientos o temblores en la montaña y con esta ayuda esperan poder alertar antes que vuelva ocurrir otro deslizamiento.
Vía satelital han encontrado que esta montana cada ano tiene un movimiento de traslación por lo que le hace pensar a los científicos que en cualquier momento la montaña podrá venirse abajo una vez más.
Cada vez que transito por Crowsnest Pass y observo la montaña, mi corazón se entristece y no puedo dejar de pensar en este triste evento. Al lado del derrumbe se puede observar un pequeño cementerio con muchas pequeñas cruces en memoria de los que no se pudieron recuperar.
Actualmente la comunidad de Frank, AB tiene varias veredas para hacer caminatas y también posee un museo interpretativo donde pueden aprender más detalles del triste suceso.
